28 Sep Un plato es un plato

Por Francisco Blanco

Ayer se celebraron las elecciones Catalanas, que no quiero ser yo puntilloso pero lo de celebración para unos más que para otros. Unas elecciones plebiscitarias para las que no me quedó claro si me tengo que quedar con los escaños o con los votos, pero esto como todo, un vaso es un vaso… bueno ya sabéis.

En «Juntos por el sí» dicen que ganaron, y no digo yo que no, pero lo cierto es que no ganaron como les hubiera gustado ganar, porque ¡Ay de nosotros! si hubieran ganado como les hubiese gustado.

Otra alegría fue para Ciudadanos, Inés Arrimada acabó la noche con las bragas en la mano, no te digo más.

Iceta lo peta, pero un poco sólo.

Coleta morada pegarse gran hostia, merecido se lo tiene, no todo en la vida es El Príncipe de Maquiavelo.

Para maquiavélica la situación de la CUP, independentistas-anticapitalistas con la llave del gobierno en la mano pero que de Mas no quieren ni oír hablar.

Albiol por su parte está encantado, no por los resultados obviamente, sino porque ya estaba harto de ir por ahí abrazando a negros y rumanos, es hora de seguir limpiado Badalona (o Barcelona)

Durán y Lleida no salió ni en los títulos de crédito.

Como anéctoda: Oriol re-cenó cuando llegó a casa.

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